miércoles, 27 de julio de 2016

Fabula de las habilidades

Una tarde se encontraban, a la vera del arroyo, la liebre y la serpiente deliberando sobre sus destrezas.
—Yo puedo correr a gran velocidad —dijo la liebre.
—Y yo puedo subir a los árboles fácilmente —expuso la bicha.
—Pero nadie escucha a más distancia que yo —se despachó la orejona.
—Eso no es nada, yo puedo escabullirme bajo cualquier cosa. —proclamó la ofidia.
—Se camuflarme en el follaje y permanecer invisible —observó la corredora.
—Puedo ser tan silenciosa que no me escucharían ni aun estando cerca —declaró la víbora.
Y así estaban, enumerando sus muchas competencias, cuando de pronto y sin aviso, apareció un cazador, que con sólo dos certeros disparos abatió a las parlanchinas.

El señor sapo, que vio toda la escena escondido en su agujero, miró a la señora sapo y le dijo: ¿Viste vieja? De nada sirve alardear de tus habilidades si no sabes utilizarlas en el momento adecuado.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario